Statkraft avanza en la tramitación del parque eólico Itsaraz, integrado por ocho aerogeneradores

• El proyecto y el Estudio de Impacto Ambiental se encuentran desde hoy en fase de información pública para que todas las partes interesadas puedan plantear sus consideraciones

• La compañía contempla una serie de medidas medioambientales entre las que se incluyen un Plan de Restauración y Revegetación, la creación de madrigueras artificiales y bebederos para la fauna. En total, destinará a medidas ambientales 725.000 euros. Además, se contempla la implantación de sistemas de parada activa para los aerogeneradores 

• Durante la fase de construcción, prevista para los años 2026-2027, se realizará un control de la calidad acústica en los municipios de Aramaio y Eskoriatza, y un equipo de vigilancia revisará cada 15 días la avifauna y la vegetación

Statkraft, primer productor renovable de Europa, continúa avanzando en la tramitación del parque eólico Itsaraz que se ubicaría en los términos municipales de Aramaio y Eskoriatza. Desde hoy, el proyecto y su Estudio de Impacto Ambiental se encuentran en fase de información pública para que las partes interesadas puedan plantear sus consideraciones, tal y como publica el Boletín Oficial de Bizkaia (BOB) y publicarán en los próximos días el Boletín Oficial del Estado (BOE), el Boletín Oficial del Territorio Histórico de Araba (BOTHA) y el Boletín Oficial de Gipuzkoa (BOG).

Con una capacidad instalada de 60,4 megavatios (MW), la instalación estaría integrada por ocho aerogeneradores de última generación. Con esta potencia, podría suministrar energía limpia y autóctona cada año a unas 44.100 familias. 

Consciente de que cualquier intervención humana tiene un impacto en nuestro entorno, Statkraft ha planteado una serie de medidas orientadas a preservar y, siempre que sea posible, enriquecer el entorno natural del proyecto. 

Así, propone un Plan de Restauración y Revegetación de la zona degradada con una extensión al menos igual al total de superficie afectada por la ejecución del proyecto. Este plan distingue entre dos fases -final de la construcción y final de la vida útil del parque-, e incluye medidas como la plantación de agrupaciones de árboles y arbustos con alta capacidad fructificante en forma de bosquetes y setos en las zonas de valle.

Para mejorar la calidad de la fauna, Statkraft propone iniciativas como la creación de madrigueras artificiales, majanos para favorecer las poblaciones de especies presa, nuevas charcas para favorecer el desarrollo de herpetofauna -reptiles y anfibios-, y puntos de agua o bebederos para fauna. También se prevé la instalación de cajas nido y de refugios para quirópteros y la implantación de un sistema avanzado de detección y parada activa de los aerogeneradores para minimizar el impacto en la avifauna.

Durante el periodo de construcción, previsto para los años 2026-2027, se realizará un control de la calidad acústica en los municipios de Aramaio y Eskoriatza, y un equipo de vigilancia, tras un jalonamiento que se realizará antes de iniciar las obras, revisará cada 15 días la avifauna y la vegetación. Al finalizar, se restaurará el terreno afectado durante esta fase y se realizará una hidrosiembra con mezcla de especies herbáceas.

En lo que se refiere a las líneas, se aplicarán diferentes medidas para evitar la colisión de avifauna. Así, tal y como recoge el Estudio de Impacto Ambiental, se instalarán balizas salvapájaros -cada 10 metros en el neutro y cada 30 metros en cada conductor-, y se aislarán los apoyos. 

Statkraft destinará a estas medidas un total de 725.000 euros.

Avanzando en el modelo de socialización 

Statkraft continúa avanzando sobre los tres ejes que vertebran sus proyectos en Euskadi: socialización de la energía a través de comunidades energéticas locales, suministro eléctrico de kilómetro cero para la industria vasca y colaboración público-privada. Cabe destacar que, además del parque Itsaraz, la compañía desarrolla otra instalación -Piaspe- entre los municipios de Azpeitia, Errezil y Zestoa, con una capacidad de 33 MW. 

En esta línea, Statkraft analiza diferentes fórmulas de participación, de manera que los ciudadanos vascos e industria local de los municipios afectados por el proyecto y alrededores más próximos tengan la oportunidad de formar parte directa del proceso de transición energética en Euskadi.

Los parques Itsaraz y Piaspe supondrían una inversión conjunta estimada superior a los 90 millones de euros y comenzarían a producir energía limpia, asequible y autóctona para el territorio en 2027. En conjunto, su producción podría abastecer el consumo medio anual de alrededor de 68.000 hogares.