Biodiversidad

Desde el inicio del desarrollo de una planta solar o eólica hasta su operación, trabajamos para evaluar el riesgo ambiental, sopesando cuidadosamente las diferentes preocupaciones e implementando actividades de mitigación y compensación. Cuando construimos nuevas plantas aplicamos las mejores prácticas y directrices internacionales adaptadas a las particularidades de cada territorio, mientras, una vez en operación, no bajamos la guardia y continuamos monitorizando el comportamiento del entorno.   

La generación de energía y su impacto en el medioambiente

Toda producción de energía tiene un impacto ambiental. Por lo tanto, nos centramos en la investigación y la planificación para predecir, comprender y minimizar los impactos de nuestras actividades.

Los desarrollos hidroeléctricos a gran escala, por ejemplo, pueden conducir a cambios significativos en las zonas naturales. Las especies de agua dulce como el salmón salvaje, la trucha y el mejillón de agua dulce son vulnerables a las barreras a la migración y a los cambios en la temperatura, el flujo y el volumen del agua. Trabajamos sistemáticamente para reducir al mínimo o mitigar esos efectos mediante, por ejemplo, la mejora del hábitat de los peces y las zonas de desove y el apoyo a la migración de los peces.

Los parques eólicos pueden repercutir en aves y quirópteros, así como en las pautas de migración de algunos animales terrestres. Por ello, realizamos evaluaciones exhaustivas del impacto ambiental y ponemos en práctica las medidas identificadas, como el establecimiento de zonas sin obras durante las fases de construcción y operación. Las zonas de biodiversidad impactadas y las zonas sensibles se identifican al principio de la fase de planificación.

Los efectos de los parques solares todavía están en proceso de ser comprendidos en su totalidad. Nos esforzamos por comprender mejor cómo nuestro negocio afecta al medio ambiente e identificamos y aplicamos las medidas necesarias para reducir este impacto. Por ejemplo, se implanta la agrivoltaica como método de compatibilización del suelo entre actividad agraria tradicional y la producción de energía renovable solar, generando sinergias positivas para el medio. 

Todas nuestras tecnologías tienen un impacto en el paisaje por la construcción de infraestructuras. Trabajamos para reducir o mitigar estos impactos mediante proyectos de revegetación, preservando el suelo, el aire y el agua de la contaminación y la gestión de residuos.

El cambio en el uso de la tierra afecta a la biodiversidad. A medida que aumenta el número de proyectos de energía renovable con uso intensivo de tierras, debemos trabajar continuamente para aplicar y abordar los desafíos como parte de nuestras operaciones diarias y tratar de reducir al mínimo el impacto potencialmente negativo.